Iniciativa que modifica el Código Civil podría abrir la puerta para que, por primera vez en el país, las familias homoparentales, dos mujeres o dos hombres, puedan inscribir a sus hijos recién nacidos.
El texto fue presentado por el diputado independiente Pepe Auth y fue respaldado transversalmente desde la UDI al Frente Amplio, de esta forma, ya sea dos mamás o dos papás podrán registrarse como progenitores de un menor en caso de aprobarse el proyecto.
Es más, se le pedirá al ministro de la Segpres, Gonzalo Blumel, respaldo del gobierno y urgencia, para que comience a tramitarse en la Comisión de Familia.
La propuesta agrega, según informó La Tercera, un inciso final al artículo 187 del Código Civil -que regula específicamente la inscripción de recién nacidos-, que señala: “En el caso de los hijos que, a seis meses de nacidos, solo tuvieran filiación determinada respecto de un padre o una madre, se permitirá la inscripción por un segundo padre o una segunda madre. Para ello, se deberá realizar la respectiva solicitud ante el Servicio de Registro Civil e Identificación de manera conjunta con el padre o madre que figura en la inscripción del nacimiento”.
Para Auth el proyecto busca “responder a un problema real, de personas de carne y hueso”. “Hay parejas homosexuales, lesbianas en particular, que se someten a tratamientos, una de ellas logra tener un hijo o hija biológica, y la segunda, la pareja que participó de la decisión, del proceso y, luego, de la crianza, no tiene ninguna relación legal con ese hijo, que es tan suyo como de la madre biológica”, explicó.
El diputado destaca, además, que la iniciativa está planteada “no desde el derecho a adoptar de una pareja homosexual, sino del derecho del niño a tener dos responsables de su cuidado”.
“Este no es un tema ideológico del derecho de las parejas”, sostiene Auth. Y así también lo entienden algunos de los parlamentarios que adhirieron a la iniciativa: Jaime Bellolio (UDI), Francisco Undurraga (Evópoli), Matías Walker (DC), Natalia Castillo (RD) y Luis Rocafull (PS).
Según explicó Castillo (RD), una de las ventajas del proyecto es que, independientemente del estado civil de sus padres, “los hijos e hijas permanecerían con el derecho de filiación”, lo que, a su vez, “asegura sus derechos, por ejemplo, a pedir pensión de alimentos, a exigir el derecho a visitas y, en el futuro, una vez que sus madres o padres fallezcan, a tener derechos sucesorios sobre sus bienes”.
JLB/Aton Chile