De las 247 solicitudes de libertad condicional presentadas por internos de distintas unidades penales de la jurisdicción, solo 45 fueron aceptadas, según informó la Comisión de Libertad Condicional. Esto significa que un 81% de las peticiones fueron rechazadas, al no cumplir con los requisitos establecidos.
La decisión se basó en los informes psicosociales elaborados por Gendarmería, que evalúan los factores de riesgo de reincidencia de cada postulante. Estos informes son fundamentales para determinar si los internos son aptos para recibir el beneficio de la libertad condicional.
El estricto proceso de evaluación tiene como objetivo garantizar que quienes accedan a este beneficio cumplan con los criterios necesarios para su reintegración segura a la sociedad, priorizando la prevención de posibles reincidencias.