Un reciente estudio realizado por la Fundación Centro de los Bosques Nativos (Forecos) para The Nature Conservancy (TNC) ha revelado la existencia de dos alerces vivos, considerados entre los más antiguos del mundo, en la Reserva Costera Valdiviana. Estos majestuosos árboles nativos han sido datados con más de 2.000 años de antigüedad.
Uno de los alerces, con un imponente diámetro de 2,6 metros a la altura del pecho, ha sido estimado en 2.208 años de edad. El segundo alerce, aún más grande, tiene un diámetro de 3,5 metros y se ha calculado que su edad es de 2.051 años.
Estos hallazgos subrayan la importancia de la conservación de los bosques nativos y la protección de estos árboles milenarios, que son verdaderos testigos vivientes de la historia natural de la región. La Reserva Costera Valdiviana sigue siendo un refugio vital para la biodiversidad y un tesoro ecológico de incalculable valor.
La investigación de Forecos y TNC destaca la necesidad de continuar los esfuerzos de conservación y gestión sostenible de los bosques para garantizar la supervivencia de estos gigantes ancestrales y preservar el equilibrio del ecosistema local.