En prisión preventiva quedaron dos cabos de Gendarmería por cometer delitos como cohecho al interior de la cárcel de Valdivia. Además otras dos personas formalizadas quedaron con medidas cautelares menos gravosas.
En una investigación liderada por la Fiscalía y en que participaron la Brigada de Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (BRIANCO) de la PDI y del Departamento de Investigación y Análisis Penitenciario (DIAP) de Gendarmería, este viernes fueron detenidos el Teniente Eduardo Arriagada; los cabo segundo Harold Momberg y Hernán Marín; además del primo de este último -quien no es funcionario de la institución- Sem Millapán.
La Fiscalía formalizó ante el Tribunal de Garantía de Valdivia a Eduardo Arriagada, por el delito de incremento patrimonial relevante e injustificado, luego de constatarse que su patrimonio personal había aumentado en 14 millones de pesos. Según el Ministerio Público, el teniente de Gendarmería recibía depósitos en sus cuentas bancarias de diferentes personas enroladas como visitantes de internos de la cárcel de Valdivia.
Momberg, fue formalizado por los delitos de incremento patrimonial relevante e injustificado (por un aumento cercano a los 11 millones de pesos); cohecho y apremios ilegítimos. A este cabo segundo, la Fiscalía lo acusó de haber recibido pagos en sus cuentas bancarias, también de personas enroladas como visitas de reos; además de haber cobrado 50 mil pesos a un interno para permitirle mantener un teléfono celular; además de otros hechos donde habría facilitado que internos fueran agredidos por otros reos, mediante el ingreso a ciertos módulos.
En tanto, al cabo segundo Hernán Marín y a su primo Sem Millapán, se les imputó el delito de cohecho. La Fiscalía expuso que el gendarme recibía enconmiendas como celulares y otros artículos para ingresarlos a la cárcel de Valdivia, los cuales eran pagados por personas enroladas en el penal, dinero que era depositado en la cuenta del primo.
El Fiscal Jaime Calfil, explicó que a solicitud del Ministerio Público el Tribunal de Garantía dispuso que los dos cabos quedaran en prisión preventiva; mientras que el teniente quedó con arraigo nacional y prohibición de ingresar a la cárcel; y el primo de uno de los cabos, quedó con arresto domiciliario nocturno.
El Juzgado de Garantía de Valdivia dispuso de un plazo inicial de 120 días para que la Fiscalía desarrolle la investigación en contra de los imputados.
Fuente: Ríoenlínea.