La cifra implicó un aumento en doce meses, el cuarto seguido después de continuas disminuciones.
En 8,4% se ubicó la tasa de desocupación en Chile durante el trimestre móvil diciembre de 2022-febrero de 2023 (DEF 2023), de acuerdo con la información registrada en la Encuesta Nacional de Empleo (ENE) que elabora el Instituto Nacional de Estadísticas de Chile (INE). La cifra significó un aumento de 0,9 puntos porcentuales (pp.) en doce meses (cuarto incremento anual después de continuas disminuciones desde febrero-abril 2021), dado que el alza de la fuerza de trabajo (4,0%) fue mayor a la presentada por las personas ocupadas (3,0%). Por su parte, las personas desocupadas se expandieron 16,0%, incididas por quienes se encontraban cesantes (16,8%) y por aquellas que buscan trabajo por primera vez (9,8%).
Las tasas de participación y de ocupación continuaron aumentando (aunque a un menor ritmo) y se situaron en 60,9% y 55,8%, creciendo 1,7 pp. y 1,1 pp., respectivamente. Comparado con igual trimestre de 2021 y 2022, la tasa de participación es más alta, pero más baja respecto a 2020 (prepandemia). Por otro lado, la población fuera de la fuerza de trabajo disminuyó 3,4%.
En las mujeres, la tasa de desocupación se situó en 9,0%, aumentando 0,7 pp. en doce meses, en tanto que las tasas de participación y ocupación se situaron en 51,1% (valor más alto desde enero-marzo 2020) y 46,5%, avanzando 2,2 pp. y 1,7 pp., en cada caso. En los hombres, la tasa de desocupación fue 7,9%, con un alza de 1,0 pp., mientras que las tasas de participación y ocupación se ubicaron en 71,2% y 65,6%, creciendo 1,3 pp. y 0,5 pp., respectivamente.
Alza de personas ocupadas
El alza de las personas ocupadas fue incidida tanto por las mujeres (4,7%) como por los hombres (1,7%).
Los sectores que contribuyeron al aumento fueron alojamiento y servicio de comidas (12,6%), actividades de salud (7,6%) y agricultura y pesca (6,0%), mientras que sectores que presentaron descensos fueron construcción (-4,7%) y comercio (-1,1%). Todas las categorías ocupacionales incidieron positivamente; las que más aportaron fueron las personas asalariadas formales (3,1%) y las personas trabajadoras por cuenta propia (2,6%).
Informalidad
La tasa de ocupación informal se ubicó en 27,3%, descendiendo 0,5 pp. en doce meses. Las personas ocupadas informales crecieron 1,1%, incididas solo por las mujeres (7,7%), ya que los hombres disminuyeron 3,7%.
Estacionalidad
La tasa de desocupación ajustada estacionalmente (que elimina los efectos de los factores exógenos estacionales de naturaleza no económica que influyen en su comportamiento coyuntural) se situó en 8,4%, sin presentar variación respecto al trimestre móvil anterior.
Horas de trabajo e indicadores de subutilización de la fuerza de trabajo
En doce meses, el volumen de trabajo, medido a través del número total de horas efectivas trabajadas por las personas ocupadas, ascendió 3,5%. El promedio de horas trabajadas creció 0,5%, llegando a 36,7 horas.
La tasa combinada de desocupación y fuerza de trabajo potencial (que mide el número de personas desocupadas más personas iniciadoras disponibles e inactivos potencialmente activos) alcanzó 16,5%, con un alza de 0,7 pp. en el período. En los hombres se situó en 14,4% y en las mujeres, en 19,2%. La brecha de género fue 4,8 pp.
Región Metropolitana
En la Región Metropolitana la tasa de desocupación del trimestre en análisis alcanzó 9,7%, aumentando 1,2 pp. en doce meses, dado que el alza de la fuerza de trabajo (4,2%) fue mayor al incremento de las personas ocupadas (2,8%). Las personas desocupadas crecieron 18,7%, incididas principalmente por quienes se encontraban cesantes.