Cifra implicó un aumento en doce meses, el segundo seguido después de continuas disminuciones. Estimación del total de personas ocupadas creció 3,3%, incidida por los sectores transporte, hogares como empleadores y enseñanza.
En 7,9% se ubicó la tasa de desocupación en Chile durante el trimestre móvil octubre-diciembre de 2022, de acuerdo con la información registrada en la Encuesta Nacional de Empleo (ENE) que elabora el Instituto Nacional de Estadísticas de Chile (INE). La cifra significó un aumento de 0,7 puntos porcentuales (pp.) en doce meses (segundo incremento anual después de continuas disminuciones desde febrero-abril 2021), dado que el alza de la fuerza de trabajo (4,1%) fue mayor a la presentada por las personas ocupadas (3,3%). Por su parte, las personas desocupadas aumentaron 13,8%, incididas por quienes se encontraban cesantes (14,0%) y aquellas que buscan trabajo por primera vez (11,7%).
Las tasas de participación y de ocupación continuaron aumentando (aunque a menor ritmo que en trimestres previos) y se situaron en 60,3% y 55,5%, creciendo 1,8 pp. y 1,2 pp., respectivamente, mientras que la población fuera de la fuerza de trabajo disminuyó 3,4%. Se destaca que la tasa de participación superó el 60%, situación no observada desde enero-marzo de 2020.
En las mujeres, la tasa de desocupación se situó en 8,6%, aumentando 1,2 pp. en doce meses, en tanto que las tasas de participación y ocupación se situaron en 50,8% y 46,4%, avanzando 2,7 pp. y 1,9 pp., en cada caso. En los hombres, la tasa de desocupación fue 7,3%, con un alza de 0,2 pp., mientras que las tasas de participación y ocupación se ubicaron en 70,2% y 65,0%, creciendo 0,9 pp. y 0,6 pp. en cada caso.
Alza de personas ocupadas
El alza de las personas ocupadas fue incidida tanto por las mujeres (5,2%) como por los hombres (1,9%).
Los sectores que contribuyeron al aumento fueron transporte (11,6%), hogares como empleadores (15,2%) y enseñanza (5,4%), mientras que las categorías ocupacionales que incidieron positivamente fueron las personas asalariadas formales (4,7%), las personas asalariadas informales (7,4%) y personal de servicio doméstico (9,4%).
Informalidad
La tasa de ocupación informal se ubicó en 27,4%, descendiendo 0,9 pp. en doce meses. Las personas ocupadas informales presentaron nula variación, ya que los hombres retrocedieron 1,0% y las mujeres aumentaron 1,2%.
Estacionalidad y volumen de trabajo
La tasa de desocupación ajustada estacionalmente (que elimina los efectos de los factores exógenos estacionales de naturaleza no económica que influyen en su comportamiento coyuntural) se situó en 8,3%, lo que implicó un aumento de 0,1 pp. respecto al trimestre móvil anterior.
En doce meses, el volumen de trabajo, medido a través del número total de horas efectivas trabajadas por las personas ocupadas, ascendió 3,0%. El promedio de horas trabajadas decreció 0,3%, llegando a 38,2 horas.
La tasa combinada de desocupación y fuerza de trabajo potencial (que mide el número de personas desocupadas más personas iniciadoras disponibles e inactivos potencialmente activos) alcanzó 15,8%, con un alza de 0,5 pp. en el período. En los hombres se situó en 13,9% y en las mujeres, en 18,3%. La brecha de género fue 4,4 pp.
Región Metropolitana
En la Región Metropolitana la tasa de desocupación del trimestre en análisis alcanzó 8,9%, aumentando 0,9 pp. en doce meses, dado que el alza de la fuerza de trabajo (2,8%) fue mayor al incremento de las personas ocupadas (1,9%). Las personas desocupadas crecieron 13,8%, incididas principalmente por quienes se encontraban cesantes.
Resumen coyunturas trimestrales 2022
Al cierre del año calendario 2022 se observó una tasa de desocupación más alta en el trimestre octubre-diciembre en comparación a 2021 (sin diferencias estadísticamente significativas), pero menor a 2020 (10,3%), cuando por efecto de la pandemia se registraron los mayores niveles de la tasa de desocupación.
Las tasas de ocupación y participación en los trimestres de octubre-diciembre 2021 y 2022 presentaron aumentos respecto a 2020 producto de la recuperación de las ocupaciones. Sin embargo, en el 2022 ambos indicadores siguen levemente por debajo de los niveles pre-pandemia (OND 2019).