Comenzar el año siempre es complejo en términos financieros y más aún tras un difícil 2019 marcado por la crisis institucional que está atravesando el país. Muchas personas han recibido menores ingresos debido a las paralizaciones, han visto cómo sus lugares de trabajo han sido destruidos o incluso han perdido su fuente laboral.
Lo anterior, sumado a los gastos que se tienen que asumir por las celebraciones de navidad, año nuevo, vacaciones, pagos de matrículas de educación, permisos de circulación, entre otros, dejan en un mal escenario económico a muchas familias las que normalmente deben acudir a los créditos para hacerles frente.
¿Cómo evitar que las deudas queden fuera de tu control? MiPlusvalia.cl, firma que otorga financiamiento a las personas haciendo uso de la plusvalía acumulada en las propiedades, entrega cinco consejos para asesorar en el manejo de sus finanzas.
1.- Parte importante del “sufrimiento” del endeudamiento se debe a no haber evaluado bien el costo asociado a las cuotas mensuales desde su inicio. En Chile existe un serio problema de educación financiera, por lo tanto, la primera sugerencia es entender que no se debe gastar más de lo que se tiene en ingresos a menos que sea una emergencia. Una excepción a esta norma general puede considerarse la obtención de un crédito hipotecario para adquirir una vivienda, dado que los bienes raíces tienden a aumentar de valor en el tiempo.
2.- En este contexto, lo esencial es informarse sobre todas las opciones de financiamiento, cotizar de acuerdo a las necesidades y las características individuales de cada caso y proyectar la capacidad de pago, incluyendo posibles imprevistos. Se debe evitar por todos los medios posibles el financiamiento de pagos mensuales a través de nuevo endeudamiento, pues eso lleva a un espiral de endeudamiento del cual es difícil salir.
3.- Es importante, también, ir más allá e informarse previo a recurrir al crédito y evitar endeudarse a largo plazo con tarjetas de crédito, pues tienen una Carga Anual Equivalente “CAE” superior al 30%. Si es que el endeudamiento es necesario, se debe siempre optar por el de menor CAE.
4.- Asimismo, es ideal adquirir sólo “buenas deudas”, por ejemplo, el crédito hipotecario para adquirir una vivienda, o uno de fines generales en caso que se requiera para pagar deudas de mayor costo o para financiar un negocio. Los créditos hipotecarios son la fuente de financiamiento con menor costo y mayor plazo. La recomendación clave para no terminar atrapados financieramente es no endeudarse para comprar bienes de consumo suntuario, como autos, viajes y ropa.
5.- Finalmente, siempre analizar que el endeudamiento sea sostenible, responsable, es decir, que se vaya reduciendo el saldo insoluto del capital adeudado en todas las deudas que tenga la persona. Si ello no es así, es posible que hayamos entrado en el espiral de pagar intereses con más deuda. En tiempos difíciles, con menor estabilidad laboral y mayor incertidumbre, es clave evitar el endeudamiento para el “consumo” y enfocarlo en la “inversión” -compra de una propiedad, capital para sacar adelante un negocio, entre otros-.